Ya sabes que el agua es un recurso escaso, frágil y finito y un elemento esencial para todos los seres vivos. Y que nuestros ríos cumplen funciones de gran importancia, además de proporcionarnos agua.

También que, por su importancia, el agua y los ríos son bienes públicos y que las administraciones públicas trabajan para proteger nuestros ríos y aguas subterráneas y asegurar el uso racional del agua por parte de todos/as.

Pero lo que aún no sabes es que, además de las personas que trabajan en las administraciones públicas, todas las personas podemos ayudar en esta importante tarea.

Te damos alguna idea para poder unirte a este importante reto. ¡Seguro que muchas ya se te han ocurrido!

1. Consume de forma responsable: ¿realmente lo necesito?

Muchas veces compramos productos que realmente no necesitamos sin darnos cuenta de que, para fabricarlos, se consumen muchos recursos naturales de nuestro planeta, como agua, materias primas o energía. Además, cuando nos deshacemos de ellos, generamos residuos que hay que gestionar y que contaminan nuestra agua y el resto de elementos del medio ambiente.

Así que, cuando te apetezca comprar algo nuevo… ¡piensa en si realmente lo necesitas y también en si puedes reparar algo que ya tengas!

2. Piensa en lo que comes: ¿puede mi comida dejar menos huella?

Necesitamos comer todo tipo de alimentos, pero muchas veces tomamos alguno de forma excesiva. Si queremos reducir nuestra huella hídrica, podemos rebajar el consumo de los productos que más agua necesitan en su elaboración, como la carne, y ampliar el de otros alimentos, como las verduras o legumbres.
Otras ideas para reducir nuestra huella hídrica son:

• Evitar el desperdicio de alimentos, porque en su producción se consume agua y energía.
• Elegir productos que no estén sobre embalados, para reducir el consumo de agua y energía que supone la producción de los embalajes (plásticos, cartones, etc.).

3. Usa solo el agua que necesitas

Hemos visto ya que el reparto de agua es desigual en el mundo  y muchos países nos hemos puesto de acuerdo para conseguir una importante misión.

También que en los países desarrollados consumimos mucha más agua en nuestros hogares que la que realmente es necesaria para beber, cocinar, asearnos y mantener limpia nuestra casa.

Si quieres contribuir a la importante misión de conseguir agua suficiente y limpia para todos, te dejamos algunas ideas que puedes aplicar en casa para consumir menos agua:

• Cerrar los grifos cuando no los estés usando: al cepillarte los dientes, al enjabonarte en la ducha…
• Usar un vaso o un cuenco en vez de abrir el grifo: por ejemplo, para lavarte los dientes o para lavar las frutas y verduras.
• Si te gusta beber agua fría, ponerla en la nevera. Si dejas siempre una jarra de agua fría en la nevera no tendrás que esperar cuando abras el grifo a que salga fresca, ahorrando una importante cantidad.

4. Ensucia menos el agua que usas

Algunas ideas para ensuciar menos el agua que utilizamos en casa son:

• Utilizar el jabón y detergente necesario.
• No tirar aceites ni productos contaminantes por el fregadero ni por el inodoro.
• No tirar papeles al inodoro, echarlos a una papelera.
• No tirar toallitas al WC, incluso si el envase pone que es apto para ello.